Celebrando el Día del Minero en Nuestra Comunidad Educativa
En una jornada llena de emociones y orgullo, nuestros estudiantes de 1° básico rindieron un merecido homenaje a los mineros y mineras, y especialmente a los valientes pirquineros de Andacollo, quienes con su esfuerzo incansable y dedicación han forjado el legado patrimonial que tanto atesoramos. Con corazones llenos de unidad, resiliencia y una profunda fe en nuestra chinita de Andacollo, estos pequeños se convirtieron en verdaderos portadores de un mensaje de admiración y respeto hacia quienes han trabajado arduamente para construir nuestra historia.
Los niños y niñas, con su entusiasmo y alegría, nos deleitaron con hermosos poemas y coreografías que destacaron el valor del trabajo sacrificado, la perseverancia en tiempos difíciles, y la fe inquebrantable que ha sostenido a nuestras comunidades mineras a lo largo del tiempo. Cada palabra y cada movimiento fueron un tributo a la fortaleza y determinación de aquellos que, día a día, enfrentan los desafíos de trabajar en las profundidades de la tierra.
Este acto no solo fue una demostración de talento por parte de nuestros pequeños, sino también una lección de vida que nos recuerda la importancia de valorar el trabajo de nuestros mineros y mineras, quienes con su labor contribuyen al desarrollo de nuestra región y país. La dedicación y compromiso de los estudiantes fueron evidentes en cada detalle de la presentación, reflejando el esfuerzo conjunto de sus profesores jefes y asistentes de clases, quienes también merecen un especial agradecimiento por su apoyo constante y colaboración en esta significativa actividad.
A través de este homenaje, nuestros estudiantes no solo honraron a los trabajadores del mineral, sino que también reforzaron en toda la comunidad educativa el respeto y aprecio por nuestras tradiciones y por aquellos héroes anónimos que, con sudor y sacrificio, han construido los cimientos de nuestra identidad.
Extendemos nuestro más sincero agradecimiento a todos quienes hicieron posible este emotivo acto, que no solo enaltece la figura del minero, sino que también fortalece los lazos de comunidad y la enseñanza de valores fundamentales en nuestros niños y niñas.
¡Que la luz y protección de nuestra chinita de Andacollo continúe guiando a nuestros mineros y mineras en su noble labor!